miércoles, 8 de abril de 2009

¡Armada!... con tijeras y plumón en mano

“Donde hay demasiado esfuerzo, hay sufrimiento, y dónde hay sufrimiento no hay éxito. Es lo que pasa cuando te inmiscuyes en algo que no te gusta…”.Con estas palabras, Belén Moran Gonzales una próspera empresaria, expresa su punto de vista para alcanzar los sueños.Llegó hace 28 años a Trujillo con una maleta de mano, tres hijos y ganas de luchar. Hoy es propietaria de una institución educativa, tres centros de belleza y muchos éxitos alcanzados, pero que-según ella- no ha alcanzado la cima…
¿Por qué no se considera exitosa?
No lo creo, por el hecho de seguir soñando, cuando alcanzo una meta de inmediato me trazo otra y considero que podré sentirme realizada una vez que vea a mis tres hijos encaminados y subsistiendo de manera independiente. En lo personal, faltan muchos proyectos por lograr, pero creo que voy por un buen camino gracias a Dios.

¿Qué valores, virtudes y defectos considera que posee?
Bueno, lo principal en mí es la perseverancia, la puntualidad, la sinceridad, el trabajo y el perfeccionismo- hasta cierto modo- ello puede ser más un defecto al convertirse en obsesión, porque me gusta que todo salga tal como lo planeo y soy vehemente con ello, igual lo manejo con la intolerancia a explicaciones, soy torpe para ser sutil con la gente, y eso aveces pudo lastimar sin quererlo.

¿A qué edad tuvo su primer hijo?
Fue a los 20 años, la llamé Belén, como yo, afortunadamente una niña muy sana, pues con semejante responsabilidad y prácticamente sola, tenía doble carga, ya que mi esposo en aquel entonces tenía como prioridad a “otras personas” antes que a su propia familia. Aún así, concebí dos hijos más, ahora ya son adultos de 28 y 23 años.
¿Cómo hacerle frente a los problemas?
Trato de sobrellevarlos con mucha cautela e inteligencia, porque si lo conduzco todo a lo emocional podría ser menos objetiva al darle soluciones. Por el contrario, suelo ser muy calculadora y no solo en los problemas sino en todos los aspectos de mi vida. Creo que quienes que se caen ante los problemas, son personas cobardes y mediocres o que aún no le han encontrado un sentido a su vida.
¿El momento más difícil?
Cuando salí de Ayacucho, era muy joven, estaba con mis tres hijos cuando llegué a Trujillo y fue una crisis total porque atravesaba el divorcio con mi esposo, aún no había aprendido a solventar mis gastos, mucho menos, los de mis hijos; porque era inexperta trabajando, no tenía el apoyo de mis padres, sin amigos, sin vivienda. O sea empecé de cero con unos cuantos soles le logré ahorrar meses antes de decidir emigrar.
¿Qué la llevó a salir de Ayacucho?
En los años ochenta era el auge terrorista y todos temíamos morir acribillados por los militares, más aun las mujeres porque intentaban detener el crecimiento de la población terrorista, y yo tenía a mis tres niños y debía protegerlos, entonces llegué a Trujillo, siguiendo el ejemplo de mi hermana mayor Gladis, quién llegó meses antes y ella fue la que me alentó a tomar esa decisión y desenvolverme en lo que realmente me gustaba.
¿Por qué pasar de profesora a estilista?
La educación inicial es una carrera muy bonita y enriquecedora, pero no me sentía satisfecha de trabajar en ello por eso te digo que fue 100% vocación, de ahí parto con que nadie debe inmiscuirse en algo que no le guste, sino se hace infeliz. En cambio, si siente pasión por algo así sea un oficio debe dar lo máximo de sí mismo para surgir y si hablamos en términos económicos un estilista hace más dinero que un profesor estatal en este
país.
¿Cómo fueron sus inicios de estilista?
La verdad es que empezó con una silla de mi cocina, una tijera de telas y un espejo de mi baño, en un humilde lote que conseguí en donde actualmente vivo (Urbanización Las Capullanas-Trujillo), no tenía ninguna cómoda, y comencé a cortarle el cabello a mis vecinas y a sus hijos; sin estudios previos, solo con el don que Dios me dio. Desde entonces, mi meta fue ahorrar hasta obtener un centro de belleza propio, ahora tengo 3, pero no me detengo…
¿Su mayor logro?
El haber ganado una licitación estatal sin ningún tipo de ayuda preferencial, para apoyar en el programa anual Pro Joven, consistía en preparar a 75 jóvenes de bajos recursos en varias áreas de mi conocimiento como estilista e insertarlos en el medio laboral con un contrato y remuneración segura. Fue un gran reto manejar el proyecto sola, pero al menos pude ganar experiencia y convencerme que la voluntad de hacer lo que te guste sea recompensado.
¿Cómo regresar de estilista a docente?
Para crear mi C.E.O.P. Belén, me empujaron las ganas de ayudar a tantas mujeres de bajos recursos que vi pasar por mi salón desde mis inicios y que viven sometidas a las “propinas” que sus maridos puedan darles, y sin ello no subsisten por sus propios medios porque no tienen preparación académica ni ocupacional. Fue más bien para brindarles una oportunidad de desarrollo fácil y autónomo.
¿Su mayor satisfacción?
Ver que mis proyectos profesionales y familiares han sido logrados hasta el momento, fruto de mi esfuerzo que ahora disfruto, pues siento la tranquilidad de no carecer de recursos económicos y así entregarle lo mejor a mis seres queridos. Dándole la espalda a personas que no apostaron nada por mí.
¿De qué manera suele escapar de la tensión del constante trabajo?
Aunque te parezca mentira, disfruto el trabajo que hago y trato de pasar el mayor tiempo haciéndolo. Pero cuando debo salir de la rutina prefiero hacerlo con mi personal porque son personas que considero y confío mucho en ellas; salimos a pasar el día en algún lugar alejado de la ciudad.
¿Cree que el dinero “compra la felicidad”?
Definitivamente, esa expresión es falsa, porque el dinero te ayuda a vivir cómodamente y alcanzar el estatus social deseado por muchos; pero no nos podemos a pensar en que hay tanta gente adinerada en el mundo que es infeliz, porque viven para hacer dinero y no para cultivar relaciones provechosas para su vida espiritual y finalmente terminan autodestruyéndose de muchas formas.
¿Algo de qué arrepentirse?
Ser la causante del vacío emocional que mis hijos tuvieron que pasar casi toda su vida, por elegir mal a la persona que fue su padre. Así, aquel aspecto para ellos ahora sea casi intrascendente, sé que en el fondo aun no han superado aquellas pequeñas cosas que envidiaban silenciosos a sus amigos que si tenían una familia completa. Es por eso que doy mi vida por ellos (…)
¿Algo que agradecer a Dios?
A él le agradezco todo lo que soy y lo que tengo, pero también le pido por todo aquello que yo no puedo resolver, tantas injusticias, enfermedades, guerras, pobreza y demás problemas que están destruyendo a este mundo que él nos regaló.
¿De todos los problemas sociales existentes, cuál es el que más le molesta?
La corrupción, los poderes estatales están corroído por lagartos que no ven más allá de la avaricia. Ellos son los responsables directos de la creciente de la delincuencia pues actúan seguros de que nuestras leyes los amparan antes que a los agraviados.
¿Una persona admirable? ¿Por qué?
La Madre Teresa de Calcuta, porque trabajó desinteresadamente a favor de los enfermos y gente de extrema pobreza, no hizo de ojos ciegos a estas realidades, más aún proviniendo de una familia acomodada. Creo que fue un gran ejemplo para todos y también para las autoridades religiosas, pues nadie hizo labor como ella.
¿Volvería a enamorarse?
No. A estas alturas de mi vida, sería difícil comenzar una relación, porque ya estoy acostumbrada a vivir sin la compañía de ningún hombre. Soy alguien muy difícil de entender y tengo otras prioridades. Una buena opción para mí, es, suplantar los deseos del amor, con las fantasías de un buen viaje con la gente que quiero…

No hay comentarios:

Publicar un comentario